Los anticoagulantes son medicamentos que se toman para evitar coágulos de sangre o impedir que estos crezcan. Su médico puede recetarle un tipo de anticoagulante como warfarina, heparina o un anticoagulante oral directo (ACOD).
Se le podrían recetar anticoagulantes para reducir su riesgo de coágulos después de la cirugía o un accidente cerebrovascular, o para tratar una afección cardíaca o pulmonar a largo plazo. El tiempo que los tome depende de razones como la ubicación y la causa de un coágulo, su riesgo de formar uno, otras afecciones médicas y su edad.
Cuando toma anticoagulantes, es más difícil que el cuerpo forme coágulos de sangre para detener la hemorragia. Esto puede hacer que las lesiones sean más peligrosas. Siga estos consejos para mantenerse seguro mientras toma anticoagulantes:
La hemorragia grave es poco frecuente, pero pregunte a su médico sobre su riesgo y otros posibles efectos secundarios. Llame inmediatamente al personal de enfermería (o al 911 fuera del hospital) si observa algún signo de sangrado peligroso:
Algunos anticoagulantes pueden causar anomalías congénitas, por lo que debe informar a su médico si podría estar embarazada.
Estos medicamentos ayudan a detener las hemorragias en situaciones urgentes al revertir los efectos de algunos anticoagulantes. Pregunte a su médico si el anticoagulante que toma tiene un agente de reversión.
Patient Guide Solutions, LLC
All Rights Reserved